Abogados De Abuso Y Negligencia En Guarderías

El abuso en las guarderías puede pasar fácilmente desapercibido, por lo que es bueno saber exactamente qué buscar, ya que lo puede ayudar a identificar el problema desde el principio, antes de que sea demasiado tarde.

• Su hijo está siempre hambriento, sediento, cuando sale de la guardería.
• Su hijo tiene moretones, ronchas, rasguños u otras lesiones, inexplicables.
• Su hijo tiene pesadillas recurrentes o terrores nocturnos.
• Su niño comienza a mostrar comportamientos agresivos.
• Su hijo tiene regresión a un comportamiento infantil o de apego.
• Su hijo llega a casa con un pañal sucio o tiene dermatitis de pañal dura más de lo normal.
• Su hijo comienza a actuar retirado o solitario.
• Su hijo empieza a tener mal comportamiento en situaciones sociales.
• Su hijo comienza a tener un interés inusual en los comportamientos sexuales.
• Su hijo desarrolla una infección del tracto urinario o se queja de dolor alrededor de los genitales.
• Su niño desarrolla un miedo a ciertos lugares, personas o actividades; un miedo excesivo de ir a la guardería.
• Si su guardería tiene cámaras de vigilancia instaladas en sus facilidades, asegúrese de que siempre tenga acceso para ver las grabaciones. Si las cámaras de vigilancia están siempre “dañadas” cuando pregunta para verlas, esto podría ser una indicación de abuso o negligencia.

Los padres pueden seguir estos consejos para asegurarse de que sus hijos sean ubicados en un ambiente de aprendizaje seguro y protegido.

• Busque el registro de alegaciones de abuso de su aquí.
• Revise a su hijo para detectar señales físicas de abuso antes y después de ir a la guardería.
• Asegúrese de que los baños no tienen áreas donde los niños pueden aislarse. Averigüe quién lleva a los niños al baño, con qué fines y en qué momento. Dos tercios de todos los abusos sexuales y explotación en guarderías se produce durante las idas al baño.
• Preguntar acerca la educación y el entrenamiento de todo el personal de la guardería que interactúan con sus hijos, y determine si hicieron revisión de antecedentes criminales, y de inestabilidad emocional o abuso de sustancias. Tenga en cuenta que los voluntarios o ayudantes de maestros, es probable que no han sido cuidadosamente seleccionados. El abuso en las guarderías puede ser resultado de un fallo en el proceso de contratación.
• Averigüe quién va a estar en contacto con sus hijos, además del personal y administradores de la guardería. Gran parte del abuso y la explotación sexual y física asociado con centros infantiles, se produce en manos de las personas que no participan directamente en la enseñanza o cuidado de los hijos: los conductores de autobuses, porteros, y los familiares de los proveedores de las guarderías. En el 36% de los casos, examinados por un estudio a nivel nacional de abuso de guardería, los niños fueron abusados ​​sexualmente por miembros de familia relacionados con el personal – principalmente esposos o hijos. Asegúrese de que el contacto de su hijo con este tipo de personas es limitado, y pregunte al niño acerca de ellos.
• Discuta en profundidad con el proveedor de la guardería, cómo se maneja la disciplina de los niños – quién la administra, bajo qué circunstancias se utiliza, y en qué forma se hace. Asegúrese de hablar con sus hijos cada día sobre lo que ocurre en el centro de cuidado infantil, prestando atención especial a que utilizaron como castigos, bajo qué circunstancias se hicieron, y cualquier otro incidente que ocurrió que el niño se sintió incómodo.
• Asegúrese de que la guardería esté diseñada para que los padres estén libres de ir y venir, sin requisitos de llamar primero y que no tengan zonas fuera del alcance de los padres.
• Si sospecha abuso o su hijo está mostrando síntomas de abuso, busque ayuda inmediatamente.